Los Caballeros Templarios
18 octubre, 2024La Camaradería
Otra sobrevivencia de los Colegios fue la Camaradería Francesa o Compañerismo en francés Compagnonnage, con este nombre se conoce a ciertas organizaciones místicas formadas entre obreros del mismo oficio, cuyo objeto es proporcionarse ayuda mutua. Según la tradición se cree que la voz Compagnonnage es de origen hebreo, habiendo provenido del Templo de Salomón. El término apareció hacia el s. XII, en las corporaciones de obreros; estos para proteger el arte de su trabajo percibieron la necesidad de formar entre sus miembros confraternidades, cuya protección debía acompañarlos en sus excursiones laboriosas, y proporcionarles ayuda fraternal y empleo en las ciudades desconocidas. Los Compagnons de la Tour, tienen sus leyendas y al igual que los Francmasones hacen llegar su origen al Templo de Salomón, existen tres líneas en el Compañerismo cada una de ellas basadas en un precursor diferente: la más antigua era la de Los Hijos de Salomón originalmente compuesta por constructores de piedra (Stonemasons) solamente; la segunda la de los Hijos de Maitre Jacque (Maestro Santiago) quienes admitían miembros de otros oficios como talabarteros, afiladores, zapateros, sastres; y la tercera seguía a Maitre Soubise originalmente formada por carpinteros. Las tres corrientes estaban organizadas de acuerdo al grado de conocimiento de sus miembros en :
Aprendices, Compañeros y Maestros. Tenían un sistema de iniciación y para alcanzar un grado superior debía presentar un examen o revelación del conocimiento de su oficio, para ellos el Templo de Salomón era la cumbre de la sabiduría y consideraban que los maestros que habían intervenido en su construcción eran iniciados por la Divinidad.
Otras corrientes de tradición sobrevivieron en Europa fueron: Los Constructores de Piedra que se estas se desarrollaron durante el s. XII en Alemania, estas originan de dos corrientes una Inglesa a través de los monjes Celtas y otra Italiana por medio de San Bonifacio,. En Inglaterra las primeras Logias (Logges, Luges, Lodges) aparecen después de la conquista Normanda en el s. XI, entre los picapedreros y albañiles que construyeron las catedrales de York, Canterbury, etc. Tres líneas de tradición confluyen en la Masonería de las Uniones Inglesas: una línea fue conservada de los misterios Celtas y Druidas, una segunda provino de los Colegios Romanos y una tercera que llegó con al conquista Normanda bajo el patrocinio de Arzobispo Lanfranc.